Morena echó al PRI en el Estado de México y con 23 entidades bajo su control comenzó a trazar la ruta para 2024, mientras que el partido que encabeza Alejandro Moreno perdió su mayor bastión, pero arrasó en Coahuila.
La morenista Delfina Gómez sacó una ventaja de aproximadamente nueve puntos sobre la aliancista Alejandra del Moral; la que se perfila como la primera gobernadora mexiquense registró entre 52.1 y 54.2 por ciento de los votos y su contrincante entre 43 y 45.2 por ciento.
“Ser la primera mujer para gobernar este estado es una noticia para celebrar, pero ser la primera gobernadora de Morena, esa sí es una verdadera victoria de las mujeres que hemos luchado por años. Vencimos el abandono y la corrupción. Se acabaron los 100 años de abandono y maltrato”, destacó la profesora.
En tanto, Del Moral, primera en perder en 100 años en territorio mexiquense, reconoció la derrota: “Para poder ganar hay que saber perder, y yo soy una demócrata; luché con todas mis fuerzas, no escatimé un solo esfuerzo, estoy en paz, tengo la conciencia tranquila, la frente en alto”.
El triunfo de Morena en el Estado de México anticipa que la estrategia política y electoral de la maestra será el ejemplo a seguir para ganar la Presidencia de la República, con la clara advertencia a sus aliados de que no permitirán dudas, egos o “ambiciones vulgares” que generen división.
En contraste en Coahuila, con una diferencia que los conteos rápidos estimaron irreversible, el priista Manolo Jiménez apaleó con más de 35 puntos de diferencia a sus tres contrincantes.
Obtuvo entre 55.7 y 58.1 por ciento de la votación, frente al morenista Armando Guadiana que se quedó con entre 19.9 y 21.9 por ciento. Esta entidad será su única carta fuerte para competir por la carrera presidencial.
El candidato priista no dudó en destacar el compromiso de su gobernador, Miguel Ángel Riquelme, a quien dijo que se le debe gran parte de este triunfo. En medio de la celebración por ganar “la batalla maestra, la joya de la corona”, Mario Delgado, dirigente morenista, no dudó en acusar a PT y a PVEM de la derrota.
“Yo creo que el Estado de México es el ejemplo de lo que se hizo bien de principio a fin. Y Coahuila, de lo que no, pese a que al final reaccionan PT y Partido Verde. Ya fue muy tarde. No haber ido unidos en el Estado de México dispersó el voto y con eso la posibilidad de que obtuviéramos el triunfo también en Coahuila.
Fuente: Milenio