Julio Ricardo Blanchet Cruz
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¡Oye!; y aquí entre nos ¿Te ha funcionado? ¿Has tenido comunicación, señal o algo por el estilo? Porque la gente ya se pregunta qué onda con todo esto. De qué sirve creer en ellos, si a la mera hora que se les necesita no aparecen por ningún lado…
No sé tú; pero por si las flies -moscas- yo ya me vacuné. Ya hasta el Dalai Lama se vacunó; lo que quiere decir que tampoco a él le ha funcionado el cuento. Y me preocupa porque como que la gente ya comienza a desconfiar…
¡Sí hombre! Aunque también ya era hora. Tanto tiempo con lo mismo. Que conste que ustedes empezaron, intervino el otro. Y luego ni qué alegar, continuó sin muy darse por aludido, cuando hasta entre los nuestros ha habido bajas; ya ves allá en México con tanto muerto; y se supone que somos sus representantes…
Los que sí no han tenido bajas son los budistas, ya te diste cuenta. Sí, pero esos no tienen representantes; tienen maestros. Y así que ni a quién reclamarle que no viene a salvarlos…
Igual que allá en Japón con los sintoístas, que ni modo que le reclamen a La Naturaleza que no viene y acaba con la pandemia. Y ni siquiera se han vacunado…
Y deja tú que dejen de creer en ellos; ni modo que vayan a seguirnos creyendo que son lo máximo, cuando no aparecen por ningún lado. El problema es que también van a dejar de creer que nosotros somos sus representantes…
Y ni modo de unirnos en una sola religión. Cómo nos íbamos a repartir la lana; y ahí iba a estar el problema. Además de que ya pareceríamos como alianza en tiempos de elecciones; Y tú y yo sabemos muy bien que nadie se salvaría de la pandemia por eso. ¡Estás viendo!…
Si, pero podríamos disculparnos porque todos esos que se mueren es porque están gordos; y luego…
Lo anterior es parte de la inédita entrevista que nos fue filtrada en exclusiva, entre el Papa Francisco y el Ayatolá Al Sistani, en Ur. la ciudad de donde salió Abraham, el patriarca de las religiones, judía, cristiana y musulmana…
Todo un personaje que por lana hacía lo que fuera; y luego que doña Sarita estaba de muy buen ver, al gusto del Faraón; pues ya sabrán amables lectores. Y si no saben, pues lean la historia…
Entrevista que nunca la podrán ver en ningún otro lado, y si la copian, se autodestruirá; toda vez que la conversación fue a puerta cerrada, sin periodistas y donde el equipo vaticano -el Papa y otros más- le echaron montón al de casa, que se presentó solo a sus 90 años, y como que lo aturdieron.
Y sin mucho cambiar de tema…
Según estudios de la Federación Mundial de Obesidad -la misma que felicitó al Gobierno por el nuevo etiquetado en los productos comestibles-. Y que no sirve absolutamente para nada; como desde antes que así se dispusiera ya se había advertido que sucedería…
La disminución en el consumo de la comida chatarra ha sido por la pandemia de mentiras que los ha tenido enclaustrados; no porque el etiquetado le haya hecho ver al consumidor las porquerías que consume…
Pero se vio la inefectividad de las advertencias etiquetadas, cuando hace ya tiempo que obligaron a las tabacaleras a poner que su producto produce cáncer y los cigarrillos se siguieron vendiendo como pan caliente. Pero en fin. Siempre se ha sabido que el hombre es el único animal que se tropieza dos veces con la misma piedra…
El caso es que la citada Federación Mundial de la Obesidad, dio a conocer que “la inmensa mayoría de los casos mortales por el Covid-19 ocurrieron en los países con más altos niveles de obesidad”.
Y nos vemos mañana, si el Sol me presta vida.
