La irrupción de la segunda presidencia de Donald Trump en Estados Unidos ha dejado claro que “la globalización, como la entendíamos, ya cambió”. Lo expone Manuel Romo Villafuerte, director general de Banamex, uno de los principales bancos del país y que, hasta diciembre pasado formaba parte de la multinacional Citi. El nuevo escenario mundial abre, contrario a lo que pareciera por lo ocurrido en estos últimos meses, una “gran oportunidad para México”, apunta.
Las alzas y bajas de los mercados financieros deben verse como movimientos de corto plazo, que no nublen la visión hacia adelante, expone Manuel Romo en una entrevista con La Jornada, previa a la 88 Convención bancaria de esta semana en Nayarit. Repasa el panorama externo, las oportunidades que observa para Banamex –que está en proceso de salir a venta a través de la Bolsa, después de desligarse de Citi– y los cambios que se esperan a partir de la reforma del Poder Judicial en el mundo de los negocios.
“Claramente, hay una volatilidad muy pronunciada en los mercados financieros desde la llegada del presidente Trump”, el 20 de enero, menciona. En particular ha sido motivada por los anuncios de aranceles, que implicaron un cambio fundamental, independientemente de que creo que no se mantengan en el largo plazo.
“Lo que sí creo es en la recomposición de lo que entendíamos como globalización. Ya cambió. Va a haber un reacomodo por bloques y México, en ese sentido, está posicionado de manera muy favorable en el de América del Norte”, considera. “Esto puede hacer más real que nunca la oportunidad que ya se exploraba desde hace tiempo del nearshoring”, dice, en referencia a la relocalización de empresas y procesos productivos de Asia a Norteamérica, que se aceleró sobre todo después de la pandemia.
La relocalización, considera, “es más real que nunca”, con esta recomposición de los bloques regionales. “En ese sentido, debemos ver la volatilidad como algo de corto plazo y más bien preocuparnos para el mediano y largo plazo en que los fundamentales de la economía del país, de la industria bancaria, del propio banco, sean muy robustos para aprovechar esta gran oportunidad que estamos viendo que puede venir para México”.
Fuente: La Jornada
