Emilio Lozoya Austin, ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex) se desistió del amparo que promovió contra cualquier orden de aprehensión o detención que haya sido girada en su contra y donde obtuvo una suspensión que impedía su captura por delitos que no ameritan prisión preventiva oficiosa.
Julio Veredín Sena Velázquez, juez Séptimo de Distrito de Amparo en Materia Penal en la Ciudad de México, publicó un acuerdo donde menciona que la apoderada legal del quejoso presentó el escrito de desistimiento “por así convenir a los intereses” del ex funcionario.
“En tales condiciones, al estar facultada la apoderada legal del directo quejoso…lo procedentes es sobreseer” el juicio de amparo, indicó el juzgador.
Hace unos días, el juez federal admitió a trámite la demanda y fijó una garantía de 50 mil pesos para que las suspensión provisional no perdiera efecto.
El ex funcionario ha comenzado ha desistirse de todo aquello que pueda frenar su libertad, una vez que solicite de nueva cuenta una audiencia para solicitar el cambio de medida cautelar en el proceso que se le sigue por el caso Odebrecht.
Emilio Lozoya también se desistió de la suspensión definitiva que le fue otorgada por un Tribunal Federal, misma que impidió que la semana pasada un juez de control se pronunciara sobre su petición de enfrentar su proceso en libertad.
El pasado 7 de diciembre, Gustavo Aquiles Villaseñor, juez de control del Centro de Justicia Penal Federal en el reclusorio Norte, llevó a cabo una audiencia, donde Emilio Lozoya pidió el cambio de medida cautelar, tras más de dos años de prisión preventiva.
Sin embargo, el juzgador declaró que estaba impedido para pronunciarse, porque está vigente una suspensión que le fue concedida por el Segundo Tribunal Colegiado de Apelación en Materia Penal en la Ciudad de México.
Dicha suspensión fue otorgada a Lozoya para efecto de que su libertad personal estuviera en manos del Tribunal y no pueda ser cambiado de prisión.
Fuente: Milenio