Cada vez se marca en la mentalidad de los mexicanos que en febrero no solo se festeja el día de la amistad, es el mes del fútbol americano, pues se realiza el evento más importante de este deporte a nivel mundial: el Super Bowl.
El próximo 12 de febrero se realizará la edición LVII de este partido, donde se enfrentarán los Kansas City Chiefs contra los Philadelphia Eagles; pero esta edición de la final de la National Football League (NFL) tiene un reto particular en territorio mexicano: “recuperar el balón” del rating.
Información de HR Media apunta que el Super Bowl LVI, partido donde Los Ángeles Rams derrotaron a Cincinnati Bengals, fue visto por 15.3 millones de personas, cifra 24.6 por ciento menor a los 20.3 millones que vieron la edición LV del juego donde Tampa Bay le ganó a Kansas City.
Mientras que datos de la investigadora de mercados Nielsen indican que la edición de 2022 fue vista por 10 millones de hogares, casi lo mismo que un año antes; ambas cifras muy por debajo de los 12.1 millones del Super Bowl donde Kansas City le ganó a los San Francisco 49ers.
Javier Balseca, especialista de marketing deportivo, confirma que la baja en rating tiene que ver con el poco volumen de aficionados que tienen ciertos equipos en México que llegan al gran partido.
“Ahora la NFL está buscando consolidar lo que viene trabajando desde hace 15 años en México, que es buscar que cada equipo eleve su fan engagement. Tradicionalmente se desarrolló una afición a ciertos equipos que ya difícilmente se cambiarían a otro equipo, pero ahora se busca que nuevas generaciones observen a otros conjuntos también”, dijo.
Fuente: Milenio