La Reserva Federal subirá casi con toda seguridad el mes que viene por cuarta vez consecutiva las tasas de interés en 75 puntos básicos, tras un esperado informe que mostró el viernes que sus agresivas alzas en lo que va de año han hecho poco por enfriar el mercado laboral estadounidense.
La valoración de los futuros vinculados a las tasas de la Fed implicaba una probabilidad del 92% de que el banco central estadounidense suba sus tipos -actualmente entre el 3% y el 3.25%- hasta un rango del 3.75% al 4% cuando se reúna el 1 y 2 de noviembre.
Esta probabilidad es superior a la del 85% observada antes del informe del Departamento de Trabajo, que mostró que los empleadores añadieron 263,000 puestos de trabajo el mes pasado, por sobre lo esperado, y que la tasa de desempleo cayó al 3.5% desde el 3.7%.
Fue la dirección equivocada para una entidad que pretende frenar la demanda de trabajo como pieza central de su batalla contra la inflación, que está aumentando a más del triple de su objetivo del 2%.
La Fed ha subido el costo de los préstamos a corto plazo más rápidamente este año que en cualquier otro momento desde los años 80, con el objetivo acabar con el calentamiento de la economía y las presiones sobre los precios.
Fuente: Forbes
