Una bella historia de amor es la que están viviendo Travis Barker y Kourtney Kardashian, quienes la mañana de este 22 de mayo unieron sus vidas en una boda de ensueño, en Portofino, Italia.
La pareja se casó en una exclusiva terraza al aire libre decorada por completo con rosas rojas, alfombras del mismo tono y un altar repleto de velas; además estuvieron acompañados por sus hijos y el clan Kardashian Jenner.
Aunque la ceremonia fue espectacular, la fiesta no se quedó atrás y como era de esperartse la novia se robó toda la atención, pues decidió cambiar su sensual vestido blanco por uno mucho más atrevido y en color negro, que iba a juego con unas medias y una chamarra que decía Mrs. Barker.
Pero por si eso fuera poco, la pareja pudo bailar por primera vez como marido y mujer con la voz de uno de los artistas más importantes, el tenor italiano Andrea Bocelli, quien cantó, en vivo el tema “Can’t Help Falling in Love”. El hijo del tenor, Matteo Bocelli, también interpretó algunas piezas para los novios.
Aunque había decenas de invitados, ellos estaban solos en su burbuja, disfrutando de cada instante juntos, una muestra de que las nuevas oportunidades en el amor pueden ser exitosas.
La ceremonia se realizó en el Castello Brown, un mirador militar del siglo XIII, mientars que la recepción tuvo lugar en la finca Dolce & Gabbana, marca que además fue la encargada de diseñar el vestuario de Kourtney y de vestir a toda la familia Kardashian.
Fuente: El Universal