El ataque en la estación ferroviaria de Kramatorsk (este de Ucrania), que dejó al menos 50 fallecidos el viernes, incluyendo niños, constituye un “crimen contra la humanidad”, declaró el jefe de la diplomacia francesa, Jean-Yves Le Drian.
“Golpean la estación donde hay refugiados, por lo tanto, civiles, algo que entra en los crímenes contra la humanidad“, afirmó Le Drian en la televisión francesa France 5.
Un misil cayó hacia las 10H30 (07H30 GMT), en la estación ferroviaria de Kramatorsk, a una hora a la que cientos de personas acuden desde hace días para esperar un tren que los saque de la ciudad, la capital de la parte de la región de Donbás que aún está bajo control ucraniano.
El gobernador de la provincia de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, afirmó en Telegram que ha habido al menos 50 muertos, entre ellos cinco niños.
Rusia negó cualquier responsabilidad y denunció una “provocación” de Kiev.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, acusó a Rusia de haber cometido una “atrocidad horrible” luego que al menos 50 personas, entre ellas cinco niños, murieran el viernes en el bombardeo de la estación ferroviaria de la ciudad de Kramatorsk, al este de Ucrania.
“El ataque de una estación ucraniana es una nueva atrocidad horrible cometida por Rusia, afectando a civiles que intentaban salir y ponerse a salvo”, tuiteó el mandatario.
Periodistas de la AFP en el lugar vieron al menos treinta cuerpos colocados en bolsas para cadáveres o bajo lonas impermeables frente a la estación.
El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, denunció la “maldad ilimitada” desatada por Rusia y sus métodos “inhumanos”.
Moscú ha negado ser responsable de este bombardeo, alegando no tener el tipo de misil que habría sido utilizado y denunciando una “provocación” ucraniana.
Kramatorsk está en la parte del Donbás bajo control ucraniano. El resto de esta región está controlada desde 2014 por separatistas prorrusos, y Moscú ha hecho de la conquista de esta zona su objetivo prioritario tras retirar sus tropas de la región de Kiev y del norte de Ucrania.
Kiev contará para esta nueva fase del conflicto con un sistema de defensa antiaérea S-300 proporcionado por el gobierno eslovaco, lo que Joe Biden agradeció en un comunicado de prensa este viernes.
Esta donación fue posible gracias al envío por la OTAN de cuatro baterías de defensa antimisiles Patriot a Eslovaquia.
Fuente: El Universal