La reforma que se pretende hacer al sistema de pensiones representa un retroceso de 25 años y pone en riesgo los logros alcanzados, advirtió el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF).
Consideró que si bien se requieren mejoras importantes, se deben realizar con consensos y enfocados a incentivar las aportaciones voluntarias.
Pero para ello, se necesita atender el problema de la informalidad y la desigualdad, señaló.
“Para tener una pensión mayor, una de las principales preocupaciones que se tienen que atender es la desigualdad y la informalidad”, dijo el presidente del instituto, José Domingo Figueroa.
En conferencia de prensa, destacó que existen 30 millones de personas que se desempeñan en la informalidad que no están cotizando en la seguridad social y a largo plazo estarán en la pobreza.
Por su parte, el presidente del comité técnico nacional de Seguridad Social, Orlando Corona, consideró que la propuesta anunciada por el gobierno federal para lograr una pensión del 100% del salario, implica regresar a un sistema de beneficio definido.
Explicó que se trata del esquema que operó a mediados de los 90 con un déficit actuarial que llegó a representar hasta el 128.8% del Producto Interno Bruto (PIB).
Tan sólo los sistemas de pensiones del IMSS y del ISSSTE concentraban el 107% del PIB de ese saldo negativo, detalló.
Si bien estaban lejos de brindar una pensión al 100% del salario, expuso, se requería incrementar las cuotas de 8.8% al 23.3% en promedio, lo que era inviable.
Fuente: El Universal
