Narcotraficantes han empezado a ser detenidos por traficar o vender el llamado fentanilo arcoiris, ese que la DEA descubrió apenas hace siete meses, super adictivo y potencialmente mortal, fabricado en los laboratorios del narco para que parezca un caramelo y así lo consuman niños y jóvenes.
La primera información sobre las pastillas de colores fue revelada por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés) en agosto del 2022 cuando anunciaron que detectaron su presencia en al menos 26 ciudades de ese país. A tan solo 7 meses de ese día, las autoridades han revelado que hay al menos 5 procesos judiciales.
Una revisión en los archivos públicos y policiales de la DEA, revelan que los casos se dieron en Nueva York y California, en donde los detenidos tenían nexos con cárteles de la droga.
Las operaciones revelan la urgencia de la DEA por frenar la tendencia de las pastillas arcoíris, que según sus propias palabras, fueron suministradas directamente por dos redes criminales de drogas: el cártel de Sinaloa y el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).
Uno de los operativos más grandes fue el que terminó en el aseguramiento de 15 mil pastillas arcoiris en Nueva York, amontonadas en una cajita de Lego. Así de fácil ha sido esconder los pequeños caramelos cargados de fentanilo.
La alarma y la preocupación de la DEA está justificada: según el Centro de Adicciones de ese país, en promedio mueren mensualmente 150 personas cada día por sobredosis relacionadas con opioides sintéticos como el fentanilo.
Las autoridades han sido claras al asegurar, que el fentanilo arcoiris va de sur a norte: en lo que va del año la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por su siglas en inglés) reveló que han incautado 58 kilos de fentanilo en la frontera terrestre, aunque no especifican cuánto de este era el llamado rainbow.
E incluso por aire y mar están mandando fentanilo: una revisión en sus estadísticas revela que la misma agencia reportó que lograron incautar en lo que va de este año fiscal 4 mil 989 kilos de fentanilo, mientras que todo el año anterior a este se decomisaron 6 mil 668 kilos en sus aduanas.
Fuente: Milenio
