La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo sostuvo que el objetivo de las marchas realizadas el sábado pasado en la Ciudad de México era golpear a los policías para que “respondieran”, y montar así la idea de que en México hay represión a los jóvenes. Ante ello, llamó a no caer en las privaciones y convocó a realizar manifestaciones de manera pacífica. También expresó que “no van a detener la transformación” con alianzas de grupos de la derecha en otros países que replicaron las protestas.
Además, pidió a la Fiscalía de la Ciudad de México investigar quienes están promoviendo y pagando este tipo de protestas con violencia, así como investigar si hubo “abusos” por parte de algún elemento.
“También lo voy a decir: ¿Creen que nos van a debilitar, que van a debilitar a la presidenta por lo que gritan? No, más fuertes es hoy, más fuerte. ¿Ustedes creen que esos gritos, leperadas, me van a hacer algo? No”, señaló.
Acotó que “habrá gente que no le caigo bien, tampoco pasa nada, pero nosotros estamos dedicados a trabajar con la fuerza que nos da el pueblo. Nosotros no nos vamos a rajar nunca. Es el pueblo, el pueblo, el pueblo”.
Consultada sobre los hechos del sábado pasado, indicó: “No vamos a caer en la provocación, las y los mexicanos no quieren la violencia. Una supuesta marcha que llama contra la violencia y utiliza la violencia, entonces no vamos a caer en la provocación porque lo que buscan son estas imágenes”, dijo este lunes en su conferencia de prensa matutina.
Luego de las marchas que se realizaron el sábado, una de ellas convocada presuntamente por la generación Z pero respaldada e integrada por integrantes de grupos de oposición, y otra por el Movimiento del Sombrero, y las cuales a su llegada al Zócalo capitalino concluyeron entre choques con policías capitalinos, la mandatario subrayó que “los jóvenes mexicanos no son violentos, y hay que escucharlos, siempre hay que escucharlos, no es una cosa contra la generación z, pero marcharon muy pocos jóvenes”.
Fuente: La Jornada
