Jesús Utrilla / NV Noticias
Este año el Instituto Tecnológico de Boca Del Río, será el acreditado ambiental para monitorear la condición del Sistema Arrecifal Veracruzano ante la actividad del Puerto de Veracruz y el impacto ambiental que se genere con la actividad del recinto portuario. Su labor incluirá el monitoreo de diversos factores ambientales con el fin de mitigar posibles afectaciones.
Fabiola Lango Reynoso, investigadora de dicha institución, explicó que uno de los principales objetivos será analizar el estado de las 48 mil colonias de coral que fueron trasladadas de Punta Gorda a la zona de El Rincón. Además, la Administración del Sistema Portuario Nacional (Asipona) ha propuesto la creación de un arrecife artificial en un área de 35 hectáreas, lo que favorecerá tanto la pesca como las actividades recreativas en la región.
“Cada cesionaria tiene la responsabilidad de contribuir a la protección del medio ambiente. Es necesario supervisar el manejo de residuos peligrosos, el consumo de energía y combustibles, así como evitar el vertido de aguas residuales en la bahía. Para ello, Asipona ha propuesto la instalación del arrecife artificial”, señaló Lango Reynoso.
El Instituto Tecnológico de Boca del Río deberá garantizar que las medidas ambientales se cumplan conforme a normativas nacionales e internacionales. Esto incluye la gestión adecuada de aguas residuales, además de impulsar acciones de educación ambiental, difusión y vinculación con la comunidad. Entre las iniciativas planteadas se encuentra la creación de un centro de cultura ambiental.
El crecimiento del Puerto de Veracruz tiene un impacto en varios municipios, entre ellos Alvarado, Manlio Fabio Altamirano, Paso Nacional, Medellín y Jamapa, lo que hace aún más relevante la implementación de medidas de mitigación. A través del manifiesto de impacto ambiental, se informará sobre las estrategias de prevención y restauración ecológica. Asimismo, un comité evaluará las acciones realizadas para garantizar el cumplimiento de los programas ambientales.
