Jesús Utrilla / NV Noticias
La introducción de cableado subterráneo de energía eléctrica en el centro de la ciudad de Veracruz no solo representa una mejora en la infraestructura, sino que también conlleva una serie de beneficios significativos.
Juan António Pinilla Rodríguez, vicepresidente de sector eléctrico de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), destacó que, aunque la inversión inicial pueda ser elevada, los beneficios a mediano y largo plazo son notables.
En primer lugar, la estética urbana experimenta una transformación positiva al eliminar los cables aéreos, postes y estructuras visibles en las calles.
Esta mejora en la imagen urbana contribuye al atractivo turístico y comercial de la ciudad, generando un entorno más ordenado y estéticamente agradable para residentes y visitantes.
“La trazabilidad técnica para instalar este tipo de infraestructura robustece el tema del suministro eléctrico y con ello seguramente el tema de los apagones se verán minimizados cada vez porque se cambiará la infraestructura nueva en lugar de la vieja y también incluye transformadores”.
Además, la infraestructura subterránea reduce la vulnerabilidad del sistema eléctrico ante condiciones climáticas adversas, como vientos fuertes, lluvias torrenciales y tormentas.
La exposición de cables aéreos a estos elementos climáticos es una de las principales causas de apagones frecuentes. Al trasladar los cables al subsuelo, se minimiza el riesgo de interrupciones en el suministro eléctrico, asegurando una mayor confiabilidad en el servicio.