En medio de la conmoción por el asesinato de un candidato presidencial y la violencia ligada al narcotráfico, Ecuador votará el domingo en unos comicios anticipados para elegir un nuevo presidente y poner fin a una crisis institucional.
El mandatario derechista Guillermo Lasso, acorralado por un juicio político, disolvió en mayo el Congreso opositor y adelantó las elecciones generales.
Pero a 11 días de la votación, el asesinato del aspirante presidencial Fernando Villavicencio cuando salía de un acto de campaña ensombreció los comicios.
“Son unas elecciones completamente atípicas, en una situación básicamente de horror que Ecuador esta atravesando por la violencia que venía instalada, pero que se manifiesta de forma más aguda y atroz con el asesinato” del político, dice a la AFP la politóloga Anamaría Correa Crespo, coordinadora de Relaciones Internacionales de la Universidad San Francisco de Quito.
El crimen alteró el espectro electoral. Luisa González, delfín del expresidente socialista Rafael Correa (2007-2017), marcha favorita en las encuestas, pero sin el porcentaje suficiente en la intención de voto para evitar el balotaje (segunda vuelta).
Para proclamarse vencedor en primera vuelta, se debe obtener el 40% de los sufragios válidos con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo.
Detrás de González se ubican el periodista Christian Zurita, amigo y reemplazo de Villavicencio; el exfrancotirador y exparacaidista Jan Topic, el líder indígena Yaku Pérez y el exvicepresidente Otto Sonnenholzner.
También se elegirán los 137 miembros de la Asamblea Nacional para completar el actual período de cuatro años, hasta mayo de 2025.
Unos 13.4 de los 18.3 millones de ecuatorianos deberán ejercer el voto obligatorio entre 07H00 y 17H00 locales (12H00 y 22H00 GMT).
Fuente: El Universal