El secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, descartó que vea a la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Maru Campos Galván, como una adversaria política y refrendó la colaboración del gobierno federal con los estados.
“Yo soy el encargado de la política interna y entre otras tareas, tengo la de conciliar, la de reconciliar, la de acordar, la de hacer la política de distinta manera; nunca, por muchas diferencias políticas que pudiéramos tener con un gobernador o una gobernadora, no lo voy a ver como un enemigo, como un adversario”, externó durante su visita por Chihuahua.
López Hernández rechazó hablar sobre su interés por la candidatura de Morena a la Presidencia de la República porque “es día laboral, van a decir que estoy haciendo campaña, pero si nos encontramos un domingo, le contesto”.
Respecto a la reforma electoral, aseguró que el 70 por ciento de los mexicanos están a favor de reducir sueldos, prestaciones y gastos onerosos de los consejeros, pues mientras su sueldo ronda los 350 mil pesos mensuales más prestaciones, un docente en Baja California Sur –por ejemplo— gana ocho mil pesos.
Sobre la exigencia de justicia por la masacre de la familia LeBarón, precisó que “no es exigencia nada más de una familia, sino que miles de desaparecidos, fallecidos y todos tienen derecho a exigir justicia, no es monopolio de una familia”.
Tras un encuentro privado con Maru Campos, se dirigió al Congreso del Estado para hacer su posicionamiento a favor de la permanencia en las calles de las Fuerzas Armadas hasta 2028, cuyo dictamen se votaría en contra, pero fue bajado del orden del día a última hora.
Fuente: Milenio