Esta semana que conluye, Twitter se convirtió formalmente en propiedad privada del magnate Elon Musk, uno de sus críticos más abiertos, conduciendo a la red social por un camino incierto.
El escrutinio rápidamente se centró en cómo funcionará la plataforma bajo un autoproclamado absolutista de la libertad de expresión que algunos usuarios temen que convierta a Twitter en un escenario global para discursos de odio y desinformación.
En un guiño a tales preocupaciones, el primer ‘acto político’ de Musk fue anunciar en Twitter que formará un “consejo de moderación de contenido” el cual tendrá por objetivo abarcar “puntos de vista muy diversos”.
“No se tomarán decisiones importantes sobre contenido o restablecimientos de cuentas antes de que se reúna ese consejo”, indicó el magnate el viernes.
“El pájaro es libre”, tuiteó el multimillonario fundador de la firma de autos eléctricos Tesla y pionero de los viajes al espacio, haciendo referencia al logotipo de la red.
El acuerdo provocó reacciones contrastadas pues mientras el expresidente de Estados Unidos (2017-2021), Donald Trump, aplaudió el cambio de liderazgo de esta plataforma que lo había bloqueado y suspendido, activistas advirtieron sobre un aumento del acoso y la desinformación.
Los políticos europeos se apresuraron a señalarle a Musk que el ‘viejo continente’ tenía regulaciones estrictas para las empresas de redes sociales.
“En Europa, el pájaro volará según nuestras reglas”, tuiteó Thierry Breton, comisionado del mercado interno de la Unión Europea (UE).
Musk había prometido volver a moderar el contenido y se esperaba que despeje el camino para que Trump regrese a la plataforma.
El profesor de filosofía de la Universidad de Yale, Jason Stanley, quien ha caracterizado el ascenso de Trump como una señal del creciente fascismo en Estados Unidos, dijo que cambiaría su modo de usar la red.
“Por el momento me quedo en Twitter. Pero voy a tratar de ser mucho más cuidadoso con lo que digo ahora que Elon Musk está a cargo. La incitación al discurso de odio en cascada puede destruir tu semana”, dijo.
Fuente: El Universal
