Con el objetivo de prevenir algún ciberataque, el gobierno de los Estados Unidos instó a México a no adquirir escáneres de China para instalarlos en los puestos de control fronterizos entre ambos países.
Según el Washington Post, la administración del presidente Joe Biden está preocupada por una supuesta amenaza a la seguridad nacional a través de dicha tecnología, pues le darían al “gigante asiático” una gran cantidad de información sobre los bienes que ingresan a EEUU.
Y es que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador se estaba preparando para comprar cientos de millones de dólares en equipos de escaneo de Nuctech, una empresa con sede en Beijing que fabrica equipos para inspeccionar equipaje y carga, pero que tiene fuertes lazos con la administración de Xi Jinping, se lee en un informe de 2020 del Departamento de Seguridad Nacional de EEUU.
De acuerdo con un documento que compartió Mexicanos Contra la Corrupción e Impunidad (MCCI) tras el hackeo del colectivo Guacamaya a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), el pasado 2 de mayo pasado, el embajador de EEUU en México, Ken Salazar, escribió una carta al titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), Marcelo Ebrard, para pedirle no buscar estos marcos rectangulares altísimos, pues advirtió que “no cumplen con los estándares de control de calidad” y la cooperación bilateral entre ambas naciones “podría verse en riesgo por el uso de equipos poco confiables”.
Por el contrario, cuando el gobierno mexicano expresó su interés en instalar equipos de escaneo modernos en su frontera, los funcionarios de EEUU lo alentaron de inmediato a comprar tecnología de una de las tres empresas de su país: Astrofísica, Leidos o Rapiscan, pero al parecer fueron menos asequibles.
El comercio transfronterizo entre EEUU y México supera los mil millones de dólares al día. La economía estadounidense depende de productos mexicanos que van desde tomates y aguacates hasta trenes de aterrizaje de aeronaves y equipos médicos de última generación.
Fuente: Infobae