El acto con motivo del tercer aniversario de la Guardia Nacional sirvió para reiterar la intención de realizar una iniciativa constitucional para incorporar esta institución de seguridad pública a la estructura de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), pues, según dijo el presidente Andrés Manuel López Obrador, se requiere disciplina y profesionalismo para que perdure.
A quienes tienen miedo de la militarización, les recordó que el comandante supremo es un mando civil, y de ahí se emanan las órdenes; mientras que a los legisladores los llamó a convencer a los diferentes partidos políticos en el Congreso de la Unión, en aras de dejar consolidada la corporación hacia finales del sexenio, y así “garantizar la paz y tranquilidad de nuestro pueblo”.
Desde el Heroico Colegio Militar, el presidente López Obrador pasó revista a las tropas, acompañado por los secretarios de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval; de Marina, Rafael Ojeda, que avanzaron sobre la batea de una camioneta tipo Cheyenne, adornada con cromáticas doradas y rotulada con los emblemas de la Guardia Nacional. El comandante de esta corporación, Luis Rodríguez Bucio, estuvo ausente, luego de haberse contagiado de covid-19.
En la explanada fueron recibidos por cerca de 400 cadetes quienes —a su graduación— serán los próximos mandos de la corporación, así como de jefes, agentes y oficiales, quienes recibieron reconocimientos.
En su discurso, el jefe del Ejecutivo federal se refirió a los avances de esta corporación que suma ya 118 mil 188 integrantes, cifra que contrastó con los 40 mil que llegó a tener la Policía Federal.
López Obrador presumió la construcción de 241 instalaciones para la corporación, 63 en proceso de construcción y 190 más proyectados. Para que, hacia finales del sexenio, se cuente con alrededor de 500 instalaciones, así como unidades habitacionales para el personal y sus familiares. Sin embargo, reconoció, “nos falta llevar a acabo otra reforma a la Constitución”.
“Aprender de lo sucedido, de cómo cuando no hay profesionalismo, disciplina, orden, honradez, mística, las instituciones no duran, son endebles, se destruyen, esto suele pasar en todas las organizaciones”, advirtió.
Además, sugirió que las tentaciones del poder y del dinero, corrompen, razón por la que “tenemos que lograr que la Guardia Nacional dependa de la Sedena”.
“Si dejamos a la Guardia Nacional dependiendo de una Secretaría o de una institución sin el profesionalismo la disciplina, la doctrina, vamos a cometer el mismo error y no podemos ya equivocarnos.
“Sí, es importante la Secretaría de Seguridad y la Secretaría de Gobernación, pero en este caso tan determinante para la vida pública de México, que la Guardia Nacional se convierta en otra rama de la Defensa, así como existe el Ejército, la Fuerza Aérea, que dependa de la Secretaría de la Defensa”, detalló.

En su mensaje ante generales, secretarios de estado, legisladores y gobernadores, el Presidente también envió un mensaje a sus adversarios, que han cuestionado la militarización y les instó a no tener miedo.
“Se cuestiona con el argumento de que no se debe militarizar la Guardia Nacional y se pone por delante, como todos lo decíamos, el respeto a los derechos humanos, pero también valorarse de que nuestro Ejército tiene un origen peculiar, no es como otros ejércitos de otros países del mundo.
“Para quienes tienen miedo de la militarización, no hay que olvidar que el comandante supremos es el Presidente de la República, y de ahí emanan la ordenes. Entonces, si el Presidente no tiene afanes represivos, si el Presidente considera que las paz es el fruto de la justicia, pues no hay nada que temer”, declaró.
Fuente: Milenio
