Sandra Cuevas Nieves, alcaldesa de Cuauhtémoc, retomó el cargo tras haber sido suspendida del puesto por casi dos semanas y lograr un acuerdo reparatorio con dos policías de la Ciudad de México, quienes la denunciaron por robo, discriminación y abuso de autoridad.
Sandra Cuevas reinició sus actividades como alcaldesa con una reunión a las 05:30 de la mañana y un recorrido por la colonia Santa María la Ribera, donde visitó el kiosco Morisko y dio indicaciones a nuevos trabajadores de la demarcación.
“A las 5:30 de la mañana debemos iniciar reunión, después nos vamos a recorrer una colonia y ahorita nos tocó Santa María la Ribera, hoy hice algunos cambios en el personal, entonces les estoy dando indicaciones de qué es lo que se debe hacer respecto al lugar que estamos visitando”, dijo.
La alcaldesa aseguró que tras la investigación que se abrió en su contra no le prestará atención a los ataques y se enfocará en lo positivo.
“Yo no me estanco en lo malo, yo lo dejo pasar, no le tomo importancia y a lo que sigue, la vida es muy corta y lo que debemos hacer es enfocarnos en lo positivo y si Dios y los vecinos me dan oportunidad de seguir gobernando la mejor alcaldía de la Ciudad de México lo menos que puedo hacer es trabajar, vamos a seguir trabajando muy fuerte por la alcaldía”, mencionó.
Ayer, Cuevas Nieves logró un acuerdo reparatorio, luego de que el 17 de marzo, la jueza Elma Maruri Carballo determinó vincularla a proceso y le fijó medidas cautelares como la separación temporal del cargo, presentación periódica ante las autoridades, la restricción para salir del país, así como no acercarse a las presuntas víctimas.
La Fiscalía General de Justicia informó que en la audiencia ce ayer, la alcaldesa reconoció que los hechos ocurrieron tal y como el Ministerio Público lo acreditó, por lo que deberá pagar el costo de un radio de transmisión y de un teléfono celular.
Asimismo, el lunes deberá pagar 30 mil pesos a ambas víctimas y ofrecerles una disculpa pública por sus actos, la cual emitió ayer tras salir de la audiencia. También deberá someterse durante seis meses a tratamiento psicológico, orientadas al manejo de la ira y las emociones, además de que tendrá que abstenerse de molestar a las víctimas y hablar o posicionarse sobre el caso durante el mismo tiempo.
Fuente: Milenio
