Washington.— “El desafío es más grave que nunca antes”. Fue así como el secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Alejandro Mayorkas, describió la situación que se vive en la frontera sur del país con la llegada de una ola de migrantes indocumentados, muchos de ellos menores de edad solos. Un flujo que llevó a las autoridades mexicanas a reforzar la presencia de agentes migratorios en la frontera con Guatemala.
Hasta el sábado había 5 mil 49 niños y adolescentes bajo la custodia de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), que tiene a su cargo la Patrulla Fronteriza, y un total de 9 mil 830 inmigrantes de todas las edades, frente a los 4 mil 615 menores y el total de 7 mil 970 indocumentados que esta agencia tenía en sus manos el jueves.
Cabe recordar que hace unos días, el gobierno de Joe Biden informó además que había 9 mil 562 menores bajo cuidado del Departamento de Salud y Servicios Humanos.
En entrevistas con las principales televisoras del país, como CNN, ABC, NBC y Fox, Mayorkas aseguró que la culpa de todo lo que está pasando es de la administración anterior, la de Donald Trump.
“Había un sistema establecido tanto bajo administraciones republicanas como demócratas, que fue desmantelado por completo durante el gobierno de Trump”, dijo. Y ahora la administración de Biden está dedicada a “reconstruir el sistema, al tiempo que atendemos las necesidades de los niños vulnerables que llegan a nuestras fronteras”.
Será difícil, reconoció, pero el objetivo es arreglar, lo antes posible, el sistema migratorio para que se ordenado, seguro y humano. Reiteró el mensaje que funcionarios de la administración han repetido una y otra vez a los migrantes: “No vengan. La frontera está cerrada”.