Moisés Hernández Yoldi
Fuertes críticas del sector empresarial al diputado federal de Morena Ricardo Exsome, luego de su abstención en la votación para reformar la Ley de la Industria Eléctrica.
En política como en la vida es importante la definición, es difícil quedar bien con todos, o eres o no eres, o vas o vienes, la indefinición suele pasar factura.
La iniciativa del presidente para reformar la Ley de la industria eléctrica es claramente estatista y forma parte de su visión nacionalista, se puede o no estar de acuerdo con ella, pero es una visión definida, consistente con un discurso que busca devolverle al Estado la rectoría del sector energético.
El sector empresarial por su parte, la considera un retroceso y un atentado en contra de la inversión privada en el sector.
La postura de organismos como Coparmex son consistentes con su filosofía, donde el libre mercado y libre competencia, son elementos angulares del liberalismo económico (neoliberalismo).
Unos y otros tienen sus argumentos y sus razones, y forman parte del gran debate en el que está inmerso México y el mundo.
El problema para el diputado Exsome es que su indefinición lo deja en medio de fuego cruzado, fallando por doble partida, incapaz de respaldar la iniciativa del presidente, pero sin la decisión ni fuerza para rechazarla.