El Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) emitió una orden a la Fiscalía General de la República (FGR) de hacer pública el expediente médico de Emilio Lozoya Austin, ex director de Pemex, donde se especificaba que padecía de anemia y de problemas en el esófago en el momento de su extradición desde España. Además, deberá exponer la bitácora del vuelo que lo trajo de regreso al territorio nacional, detallando a los funcionarios de la FGR que lo abordaron, el modelo de avión, matrícula y demás detalles.
La primera respuesta de órgano judicial se negó a entregar los documentos requeridos, argumentando que dichos se encontraban relacionado a una investigación abierta, por lo cual debería ser considerada como confidencial.
Aprobado por unanimidad, el proyecto de resolución que modifica la respuesta inicial respuesta fue presentado por el comisionado Francisco Javier Acuña y aprobado por unanimidad, a pesar de la oposición de tres comisionados, Rosendo Evgueni Monterrey, Josefina Román y Adrián Alcalá, quienes consideraron que revelar el documento médico se trata de un dato personal sensible y propusieron someterlo a una prueba de interés público previo a una divulgación. Además, la comisionada presidenta, Blanca Lilia Ibarra, emitió voto particular en relación a la privacidad de los nombres de los funcionarios que realizaron el viaje.
Sin embargo, se hizo hincapié en la importancia de la información médica utilizada como base de la apelación por la que Lozoya no fue trasladado a un reclusorio al momento de ser extraditado a México, pues Acuña afirma que la comunicación fue deficiente e incluso inconclusa durante esa noche.
“La propia autoridad que trajo al extraditado lo dijo, y lo único que ahora importa es que lo sostenga, que lo compruebe, que se pueda comprobar”, argumentó el comisionado.
Fuente: Milenio
