La panista Margarita Zavala decidió no excusarse de votar la reforma eléctrica pese a ser acusada de un presunto conflicto de interés, al beneficiarse con más de 8 millones de pesos de Avangrid, filial de Iberdrola, de la cual fue consejero su esposo, el ex presidente Felipe Calderón.
“Actué de buena fe, conforme a la ley y que me respondieran el tema..la dirección respondió que no había conflicto de interés”, dijo.
La ex primera dama aseguró que diputados de oposición “han utilizado este momento para retrasar un debate que no quieren dar” y acusó que los señalamientos en su contra son “una clara violencia de género”.
“No me excuso por la defensa del derecho y de México, de nadie más”, expresó.
Fuente: Milenio