El presidente, Donald Trump, defendió ayer al príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed Bin Salman, por el caso del asesinato del periodista Jamal Khashoggi, a quien agradeció por el anuncio de que su país invertirá cerca de un billón de dólares en Estados Unidos.
El jefe de la Casa Blanca desestimó las conclusiones de funcionarios de inteligencia estadunidenses que apuntaban a que Bin Salman probablemente tuvo alguna responsabilidad en el asesinato en 2018 de Khashoggi, periodista del Washington Post, a quien calificó de “extremadamente polémico”.
El mandatario estadunidense expresó que “a mucha gente no le caía bien ese señor”, al tiempo que elogió el “increíble historial en materia de derechos humanos” del reino saudita.
“Te guste o no, las cosas pasan”, declaró el magnate a una periodista durante una comparecencia bilateral en el Despacho Oval. “Pero (el príncipe Mohammed) no sabía nada. Y podemos dejarlo así. No hace falta avergonzar a nuestro invitado con una pregunta de ese tipo”.
Trump amenazó con revocar la licencia de transmisión de la cadena ABC, enfurecido por las preguntas de la periodista sobre el asesinato, los negocios de su familia en Arabia Saudita y el escándalo del depredador sexual Jeffrey Epstein.
Fuente: La Jornada
