Jesús Utrilla / NV Noticias
El crecimiento de la delincuencia digital mantiene en alerta a especialistas, ya que los criminales encontraron en la tecnología nuevas formas para cometer fraudes, robar identidades y acceder a información privada sin que las víctimas se den cuenta o denuncien.
Saúl Solís, integrante del Centro Nacional de Capacitación de Canacta, señaló que la delincuencia aprovecha el anonimato y la rapidez de las herramientas digitales para atacar.
“La mente del criminal ha cambiado, la forma en la que trabaja y usa la tecnología está dañando a la gente. Hoy podemos ser defraudados por mensajes falsos o suplantación de identidad. El delincuente se está preparando más que el ciudadano y los delitos tecnológicos están en alza, pero cualquier cifra que se diga es falsa porque mucha gente no denuncia por pena de haber caído en una estafa”.
Explicó que el uso de inteligencia artificial incrementó la capacidad de los delincuentes para clonar voces, imágenes y generar contenido que aparenta ser real, afectando a usuarios que desconocen los riesgos.
“La policía cibernética está haciendo lo mejor que puede con las herramientas actuales, pero la delincuencia es más creativa y nosotros estamos siendo reactivos. Ellos no tienen que cumplir protocolos y siguen avanzando, mientras que la policía debe investigar, pedir autorizaciones y cuidar derechos humanos en cada paso”.
Dijo que todos los usuarios de dispositivos electrónicos están expuestos a ataques como robo de cuentas bancarias, filtración de fotografías personales y fraudes mediante enlaces maliciosos. Por ello, urgió a la población a reforzar su seguridad personal con contraseñas seguras, métodos de verificación y mayor cautela en el uso de redes sociales y aplicaciones móviles.
