Tras las severas inundaciones provocadas por el desbordamiento del río Cazones, que han dejado a miles de habitantes sin hogar en el norte de Veracruz, empresas del sector de la construcción han respondido de manera solidaria para apoyar las labores de auxilio y reconstrucción en la zona afectada.
Compañías veracruzanas se sumaron al llamado de la gobernadora Rocío Nahle García, quien desde el inicio de la contingencia ha encabezado y coordinado los esfuerzos de atención a los damnificados. La participación del sector privado ha permitido fortalecer la capacidad operativa de las brigadas que trabajan en comunidades donde los daños han sido mayores.
Camiones de carga, trascabos, retroexcavadoras y otro tipo de maquinaria especializada fueron movilizados hacia los municipios impactados, con el propósito de apoyar en el retiro de escombros, rehabilitación de caminos, limpieza de viviendas, construcción de accesos emergentes y labores de protección civil.
Las empresas constructoras involucradas han destacado que este apoyo es parte de su compromiso social con Veracruz y una muestra de respaldo a las acciones que encabeza el gobierno estatal para atender a las familias afectadas. La coordinación entre autoridades y sector privado ha permitido acelerar la respuesta ante la emergencia, así como reforzar el despliegue de recursos materiales y humanos.
La gobernadora Rocío Nahle ha reconocido la disposición de las empresas que se integraron a las tareas de apoyo y subrayó que la solidaridad y colaboración entre gobierno e iniciativa privada son fundamentales para enfrentar los efectos de este tipo de desastres naturales.
Las labores continuarán en los próximos días, con el objetivo de restablecer condiciones básicas en las comunidades afectadas y avanzar hacia la recuperación de la infraestructura dañada.
