La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo señaló que en la decisión del Departamento del Transporte de Estados Unidos (DOT) de revocar la inmunidad antimonopolio que hacía posible desde 2016 la alianza entre Aeroméxico y Delta Air Lines, “creemos que son otros intereses los que están detrás”. Afirmó que no hay algún reclamo de aerolíneas por el traslado de las operaciones de carga del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) al Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), y por el contrario, “están felices” con ese movimiento.
Al referirse a este caso durante su conferencia de prensa matutina, la mandataria sostuvo que el gobierno mexicano respondió de manera puntual a los cuatro puntos con los que el gobierno estadunidense puso bajo revisión la alianza entre ambas aerolíneas, bajo el argumento, entre otros, de que se violaba el Acuerdo de Transporte Aéreo entre Estados Unidos y México.
Explicó que el Departamento del Transporte hizo cuatro observaciones, particularmente al AICM que fueron contestadas. Los otros tres puntos se respondieron con una actualización de normas que ya estaba prevista.
“No encontramos ninguna razón para la decisión que están tomando, que tiene que ver con no validar de nuevo esta alianza Delta-Aeroméxico. Porque dicen que uno de los argumentos es que se llevó la carga del AICM al AIFA, y como lo dije el otro día: todas las aerolíneas estadunidenses y del mundo entero están muy contentos de haberse ido al AIFA, están felices. Si hay algún tema relacionado con algún retraso en aduanas, recintos fiscales, se está resolviendo, pero nadie reclama, ninguna aerolínea reclama, ninguna, que se haya movido la carga del Benito Juárez (AICM) al Felipe Ángeles (AIFA), ninguna”, expuso.
Ante ello, expresó que “no entendemos esa posición, asumida por el departamento del Transporte de Estados Unidos.
“Más bien creemos que son otros intereses los que están detrás de esta resolución relacionada con Delta y Aeroméxico, que en todo caso estamos revisando”, subrayó la jefa del Ejecutivo federal.
Fuente: La Jornada
