Jesús Utrilla – NV Noticias
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) del INEGI, 63.2 por ciento de la población considera inseguro vivir en su ciudad.
Jeremías Zúñiga Mezano, presidente de Comunidades Seguras en el estado, explicó que en México, la percepción de inseguridad sigue siendo elevada, aunque los datos oficiales muestran una disminución sostenida en la incidencia de delitos de alto impacto. Agregó que gran parte del miedo se construye a partir de la información compartida en redes sociales y medios de comunicación. Esto genera un contraste entre lo que sienten los ciudadanos y la realidad registrada por las autoridades.
“En México se vive con miedo por los comentarios que se comparten en redes y se gritan en algunos noticieros. Pero no todo lo que tememos está ocurriendo. Vivimos en una nación donde la percepción de inseguridad supera a la realidad, y donde el miedo se propaga más rápido que los delitos”.
Agregó que de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) indican que entre enero de 2019 y julio de 2025 los homicidios dolosos bajaron 18 por ciento, el secuestro más de 50 por ciento el robo a vehículos 41 por ciento y el robo a casa habitación 37 por ciento. En delitos patrimoniales como el robo a transeúnte, la reducción nacional es del 30 por ciento en zonas urbanas, mientras que en Veracruz es aún mayor en municipios con vigilancia reforzada.
En el caso de los feminicidios, Veracruz registró solo 11 casos en el primer semestre de 2025, con una tasa de 0.4 por cada 100 mil mujeres, muy por debajo del promedio nacional de 1.5 y de países como Honduras, Brasil o Sudáfrica.
“No se trata de minimizar los crímenes, sino de dimensionarlos con base en datos y responsabilidad informativa. La violencia existe, pero también existen avances que deben reconocerse”.
Advirtió que la percepción de inseguridad tiene efectos concretos como frena la inversión, reduce la actividad económica nocturna, aumenta los costos de seguridad, afecta la salud mental y genera restricciones en la vida familiar y escolar. Según la Secretaría de Salud, los trastornos de ansiedad aumentaron 21 por ciento en los últimos tres años en zonas con alta percepción de inseguridad.
Insistió en la importancia de comunicar con responsabilidad, verificar información, reforzar las fuentes oficiales y dimensionar la violencia con cifras.
“La seguridad no se construye solo con patrullas. También se construye con palabras, con cifras y con compromiso colectivo. México necesita realismo, no alarmismo. Veracruz demuestra que sí es posible avanzar. Pero si no cambiamos la manera en que narramos nuestra realidad, seguiremos atrapados en un país más temido que vivido”, concluyó.
 
						
									
 
								
				
				
			 
 
 
 
				 
				 
				 
				 
				 
				 
				