Jesús Utrilla | NV Noticias
La construcción de nuevos centros penitenciarios en Veracruz contribuirá a mejorar las condiciones de reclusión y garantizar el respeto a los derechos humanos de las personas privadas de su libertad.José Alberto Priego Miranda, presidente del Colegio de Abogados de Veracruz, señaló que esta decisión generará beneficios tanto para la sociedad como para quienes se encuentran en los penales.
Con la edificación de nuevos centros penitenciarios, confió en que se pueda atender de raíz uno de los principales problemas del sistema carcelario en Veracruz que es el hacinamiento. Esta situación no solo impacta en la vida de los internos, sino también en las condiciones laborales del personal y en la seguridad al interior de los penales.
“Creo que es bastante benéfico este anuncio, va a beneficiar a toda la población, a todos los abogados e incluso al personal que se encuentra recluido. Van a aumentar las condiciones de dignidad incluso de los propios reclusos. Hay que recordar que no por haber cometido un delito pierden sus derechos humanos”.
Agregó que la medida ayudará a eliminar el hacinamiento en los centros de readaptación social. Además que el centro de reclusión de Playa Linda, conocido como el “penalito”, no puede seguir operando en las condiciones actuales, pues presenta hacinamiento y carece de la infraestructura necesaria.
“Esto va a favorecer porque se van a eliminar las condiciones de hacinamiento. Habrá más salud para ellos y puede existir mayor gobernabilidad en estos centros de readaptación. Es una medida favorable y esperamos que uno de ellos se construya en la ciudad de Veracruz donde lo necesitamos ya que desde hace años no tenemos uno”.
Priego Miranda dijo que avanzar en infraestructura penitenciaria permitirá generar un entorno más digno y seguro, lo que a su vez se traducirá en mayor gobernabilidad. Reiteró que es urgente construir un reclusorio en la ciudad de Veracruz, donde desde hace años no se cuenta con uno, y que el llamado “penalito” de Playa Linda debe dejar de utilizarse por no reunir las condiciones mínimas para seguir funcionando.
