Jesús Utrilla / NV Noticias
La violencia vicaria sigue afectando a mujeres en el estado de Veracruz, advirtió Jorge Reyes Leo, presidente del Colegio Nacional de Abogados Penalistas. Señaló que este tipo de agresión continúa siendo utilizada por hombres con poder político o económico para dañar a sus exparejas a través de los hijos e instrumentalizando el sistema de justicia.
“La violencia vicaria ocurre cuando se utiliza a los hijos para dañar a la madre, privándola de la convivencia, manipulando procesos legales o incumpliendo obligaciones. En muchos casos, los agresores son funcionarios públicos que, en lugar de predicar con el ejemplo, usan su posición para evadir responsabilidades y ejercer violencia desde el poder”.
Reyes Leo mencionó que la legislación sobre violencia vicaria ya existe en Veracruz, pero su aplicación aún es limitada, especialmente en contextos donde prevalece el machismo o donde los agresores tienen influencia en el ámbito público o institucional.
“La impunidad en estos casos no solo perpetúa la violencia, sino que también desacredita al sistema judicial. Por eso, hacemos un llamado a las autoridades a que actúen con firmeza, sobre todo en un proceso electoral, donde es vital que quienes aspiran a cargos públicos tengan una conducta ética y limpia”.
En el marco de la propuesta de reforma al Poder Judicial que plantea la elección de jueces y magistrados por voto ciudadano, el presidente del colegio pidió que se revise cuidadosamente el historial de los aspirantes, especialmente aquellos que enfrentan denuncias o antecedentes de violencia de género.
“Nosotros, como operadores del sistema de justicia, conocemos a muchos de los perfiles que aspiran. Es importante que quienes regulan el proceso electoral y judicial verifiquen quiénes son estas personas, ya que la ciudadanía no siempre tiene acceso a esa información. No es ético que alguien con antecedentes de este tipo participe en la administración de justicia”.
Asimismo, lamentó que durante los procesos electorales sigan ocurriendo hechos violentos que alteran el ambiente democrático.
