El representante palestino ante la Corte Internacional de Justicia (CIJ) declaró este lunes que Israel está utilizando el bloqueo de la ayuda humanitaria para Gaza como un “arma de guerra”, durante la apertura de semana de audiencias en el máximo tribunal de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en La Haya.
Israel -que no reconoce la jurisdicción de la CIJ y anunció que no participaría- denunció que el proceso “forma parte de una persecución sistemática”.
La CIJ inició cinco días de audiencias para aclarar qué debe hacer Israel con respecto a la presencia de la ONU y sus agencias, organizaciones internacionales o de otros Estados para “asegurar y facilitar la entrada sin obstáculos de suministros urgentes esenciales para la supervivencia de la población civil palestina”.
Un panel de 15 jueces pronunciará un dictamen consultivo, que no es vinculante, después de que la Asamblea General de Naciones Unidas adoptó en diciembre por amplia mayoría una resolución para pedir que la CIJ emita una opinión consultiva “con urgencia máxima”.
Los magistrados escucharán los argumentos de una decena de Estados, del representante de los palestinos y de organizaciones, en un momento en que Israel impuso hace cerca de 50 días un bloqueo total a la ayuda que entra a la franja de Gaza, devastada por la guerra.
El representante de los palestinos, Ammar Hijazi, dijo a los jueces que “todas las panaderías de Gaza que reciben ayuda de la ONU se han visto obligadas a cerrar sus puertas”.
“Nueve de cada diez palestinos no tienen acceso al agua potable. Las instalaciones de almacenamiento de la ONU y otras agencias internacionales están vacías”, señaló Hijazi, representante de la Autoridad Palestina.
“Hay hambre. La ayuda humanitaria se está utilizando como arma de guerra”, concluyó el representante palestino.
El ministro israelí de Relaciones Exteriores, Gideon Saar, declaró a los periodistas en Jerusalén que “este caso forma parte de una persecución sistemática y de la deslegitimación de Israel”.
“No es Israel quien debería estar siendo juzgado, sino la ONU y la Unrwa”, añadió, en referencia a la Agencia de la ONU para los refugiados palestinos, bajo prohibición de operar en territorio israelí.
Las autoridades israelíes acusaron a algunos empleados de la Unrwa de estar implicados en el ataque de Hamas del 7 de octubre de 2023, que provocó el estallido de la guerra en Gaza.
Investigaciones independientes indican que no se han aportado pruebas que respalden esta acusación.
Fuente: La Jornada
