Uno de los momentos que más esperan los fanáticos del cine es el de las entrevistas Actors on Actors de Variety. Lo que más gusta de este formato es la posibilidad de ver a dos estrellas de la industria abrirse en una conversación en la que se habla en profundidad sobre el trabajo de ambas. Las combinaciones también suelen ser muy celebradas y comentadas como por ejemplo la de Ariana Grande y Paul Mescal que todo el mundo esperaba tras el éxito simultáneo de ‘Wicked’ y ‘Gladiator II’ en cines. O la pareja formada por Drew Starkey y Harris Dickinson que se ha hecho viral en redes por el parecido entre ambos y su buena sintonía.
En estas entrevistas suele crearse un espacio seguro en el que se comparten intimidades y entresijos de los procesos de producción de diferentes proyectos, algo que siempre deja buenos titulares. Así ha ocurrido con Mikey Madison, la joven actriz que protagoniza ‘Anora’ a la que han emparejado formato con un icono como es Pamela Anderson, cuyo próximo trabajo ‘The Last Showgirl’ le ha valido, por el momento, la nominación a mejor actriz en una película de drama en los Globos de Oro.
Durante su conversación surgió el tema del coordinador de intimidad, una nueva figura que ha cogido fuerza en los últimos años y que responde a la necesidad de proteger a las actrices del acoso sexual y las malas conductas en la industria a raíz del movimiento #MeToo que surgió tras el escándalo de Harvey Weinstein. Madison ha confesado que tomó la decisión de no contar con esta figura en las grabaciones después de que los productores le preguntases si quería o no tener uno. Asegura que tanto Mark Eydelshteyncomo ella prefirieron “mantenerlo pequeño” y contar únicamente con Sean Baker, el director, y Samantha Quan, su mujer que también es productora.
Madison ha explicado que la experiencia para ella fue “muy positiva”. La actriz asegura que, tras haber visto las anteriores películas de Baker “conozco su dedicación por la autenticidad, por lo que quería sumergirme de lleno en eso, así que estaba preparada para ello”. Sobre la desnudez y la forma en la que su personaje vive su sexualidad, la estadounidense afirma que “como actriz lo he afrontado como si fuese un trabajo”. “Estaba muy cómoda”, concluye finalmente en el clip que se ha viralizado en las redes y que ha provocado todo tipo de comentarios.
Como era de esperar este vídeo ha incendiado las redes que se han llenado de opiniones. Hay quien ataca a Madison por defender la idea de que un coordinador de intimidad quita autenticidad a las escenas. Aseguran que estas declaraciones marcan un precedente peligroso para la seguridad de las mujeres en los sets de rodaje. Otra mucha gente ha querido defender a la actriz a la que no consideran culpable de las decisiones que toman el director y el equipo de producción.
