Gladys de L. Pérez Maldonado.
Diversas son las trincheras desde donde las mujeres luchan por la defensa y respeto de sus derechos.
En esta ocasión, en el marco de la conmemoración del Día de Acción Global por un Aborto Legal y Seguro, el 28 de septiembre cientos de mujeres marcharon a lo largo y ancho de la República Mexicana, y otras desde la academia participaron en foros alusivos al día, lo cierto es que, todas con la finalidad de concientizar a quienes deciden, que el aborto en México debe despenalizarse.
Usted se preguntará ¿Por qué la mujer está tan interesada e insistente, o al menos algunas mujeres, en que la interrupción del embarazo sea legal?, pues bien, el aborto en México es considerado como un crimen, sin tomar en cuenta que la vida y la salud reproductiva de millones de mujeres depende de prejuicios, creencias religiosas, cárcel y muerte.
El acceso al aborto seguro y legal es una cuestión de derechos humanos. El gobierno mexicano tiene la obligación de promover, respetar, proteger y garantizar los derechos humanos de las personas y en consecuencia, debe hacer realidad los derechos humanos, incluidos los relativos a la salud, la autonomía sexual y reproductiva de mujeres y niñas. (Art. 1º de la CPEUM).
Además, es un derecho humano y Constitucional de la mujer “decidir de manera libre, responsable e informada sobre el número y el espaciamiento de sus hijos”. (Párrafo segundo, art. 4º de la CPEUM).
Cuando los servicios de aborto seguros y legales están restringidos sin justificación o no se encuentran plenamente disponibles, esto pone en riesgo una variedad de otros derechos humanos protegidos internacionalmente, como el derecho a no sufrir discriminación, a la igualdad; a la vida, la salud y la información; a no sufrir tratos crueles, inhumanos o degradantes; a la privacidad y la autonomía e integridad física; a decidir sobre el número y espaciamiento de los hijos e hijas; la libertad; a disfrutar de los beneficios del avance científico y a la libertad de conciencia y religión. (Fuente: www.hrw.org)
Estos derechos se establecen en la Declaración Universal de Derechos Humanos y se protegen a través de numerosos tratados internacionales, como el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC), el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (PIDCP), la Convención contra la Tortura (CCT), la Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW) y la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), entre otros, de los que México es parte.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha indicado que las complicaciones en el embarazo y el nacimiento son la causa principal de muerte de niñas y mujeres jóvenes de entre 15 y 19 años de edad, y que las niñas de entre 10 y 14 años tienen un mayor riesgo de sufrir problemas de salud y de muerte debido al embarazo que las personas adultas. También ha concluido que eliminar las restricciones al aborto redunda en una reducción de la mortalidad materna.
La tasa de abortos inseguros o clandestinos es casi 45 veces mayor en países con leyes sobre aborto sumamente restrictivas que en los países donde el aborto es legal y no existen restricciones a esa práctica. (Fuente: www.oms.org)
El Comité de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre los Derechos del Niño ha exhortado a los Estados a “que despenalicen el aborto para que las niñas puedan, en condiciones seguras, abortar y ser atendidas tras hacerlo, así como a que revisen su legislación para asegurar que se atienda el interés superior de las adolescentes embarazadas y se escuche y se respete siempre su opinión en las decisiones relacionadas con el aborto.”.
El Relator Especial de la ONU sobre el Derecho a la Salud sostiene que “las leyes penales que castigan y restringen el aborto inducido son barreras inaceptables que impiden a las mujeres ejercer su derecho a la salud y, por consiguiente, deben eliminarse.”.
Cuando se prohíbe o se restringe el aborto, no se evita el aborto, por el contrario, se realizan de manera clandestina en condiciones insalubres y utilizando métodos peligrosos, como brebajes con hierbas, ganchos, pastillas no controladas, en clínicas a cargo de personas corruptas que se aprovechan de la necesidad de la mujer para hacer cobros excesivos por sus servicios y la mayoría de los casos terminan en hemorragias incontenibles o infecciones que ocasionan la muerte de la paciente y generan una mayor mortalidad y morbilidad maternas.
Quienes promueven la penalización del aborto, se dicen a favor de la vida, luego, ¿a favor de que vida están predicando? Se han preguntado, ¿cuántos recién nacidos son abandonados en la calle, con motivo de embarazos no deseados?, resultaría interesante entrevistarlos para entender su postura…
Muchas personas consideran que la despenalización tiende a que el aborto sea usado como medio anticonceptivo, sin embargo, como dato estadístico se demuestra lo contrario, pues durante diecisiete años en el Ciudad de México el porcentaje de reincidencia ha sido del 1%.
No se puede olvidar que los derechos humanos no tiene religión, vivimos en un Estado laico y las políticas públicas no se pueden encaminar en función de creencias religiosas, si no en aras de la protección de la salud y la vida de sus gobernadas.
El hecho que las mujeres tengan la capacidad biológica de concebir, no significa que estén obligadas a ser madres, aunado a que, ninguna mujer queda embarazada deliberadamente para después abortar.
Al día de hoy, en México se cuentan con 14 Entidades Federativas de 32, que han despenalizado el aborto y se permite el aborto legal por decisión de la mujer la mayoría hasta las 12 semanas de gestación, estas son: Ciudad de México (2007), Oaxaca (2019), Baja California, Colima, Hidalgo, Veracruz, Coahuila (2021), Baja California Sur, Sinaloa, Guerrero y Quintana Roo (2022), Aguascalientes (2023), Puebla y Jalisco (2024).
Aún queda un camino largo y tortuoso por recorrer en cuanto a la despenalización del aborto, sin embargo, desde Alguien como tú seguiremos insistiendo en la concientización de las autoridades legislativas para que se observe el derecho convencional y se haga Justicia a las mujeres y las niñas mexicanas en este rubro…