Tal y como lo esperaba el mercado, la Reserva Federal mantuvo sin cambios el nivel de la tasa de interés en un rango de entre 5.25 y 5.50 por ciento en su reunión de este 31 de enero.
Esta fue la cuarta reunión en la que el Banco Central de Estados Unidos deja en ese rango la tasa de referencia, nivel que alcanzó en la decisión de julio de 2023 y es el más elevado de los últimos 22 años.
La decisión de la Fed se dio en medio de una inflación que cede paulatinamente. Hasta diciembre del año pasado, el Índice de Precios de Consumo Personal (PCE) y al que da mayor seguimiento el ente monetario se ubicó en 2.6 por ciento anual y la subyacente en 2.9 por ciento.
“Esperamos conseguir una mayor confianza. Buscamos una mayor confianza en quela inflación se está moviendo de manera sostenible hasta el 2 por ciento”, dijo Powell en conferencia. Señaló que, si bien la inflación se ha moderado en los últimos seis meses, la respuesta a los futuros movimientos dependerá del desarrollo de los datos entrantes, la evolución de las perspectivas y el equilibrio de riesgos.
“El Comité considera que los riesgos para lograr sus objetivos de empleo e inflación se están equilibrando mejor. Las perspectivas económicas son inciertas y el Comité sigue muy atento a los riesgos de inflación”, señaló la Fed en su anuncio de política monetaria.
Además, recalcó que el Comité está preparado para ajustar la postura de política monetaria si surgen riesgos que puedan impedir el logro de los objetivos y que tendrán en cuenta las condiciones del mercado laboral, presiones inflacionarias, expectativas de inflación y los acontecimientos financieros e internacionales.
Fuente: El Financiero