Unas horas después de conocer la decisión de Hamás de liberar a dos ciudadanas estadounidenses, Judith y Natalie Raanan, madre e hija, el padre de esta última, Uri Raanan, afirmó que se encuentran bien, felices y con muchas ganas de volver a casa.
“Hablé con mi hija hoy. Suena muy bien, se ve muy bien. Ella estaba muy feliz y está esperando volver a casa“, afirmó en una conferencia de prensa desde Bannockburn, el municipio del estado de Illinois donde residen.
Su exesposa, detalló, tiene “un pequeño rasguño en la mano” pero “no es nada, está bien”.
El portavoz de las Brigadas Al Qasam, brazo armado de Hamás, anunció este viernes la liberación de las dos rehenes estadounidenses -que estaban en Israel visitando a unos familiares- por “razones humanitarias”, tras la mediación de Catar.
Afirmó que han adoptado este gesto para “demostrar al pueblo estadounidense y al mundo que las afirmaciones hechas por (el presidente de EE.UU. Joe) Biden y su Administración fascista son falsas e infundadas”.
Tras ser liberadas fueron sometidas a revisiones médicas y recibieron la llamada telefónica del presidente Biden. La embajada de EE.UU. en Jerusalén publicó una fotografía a través de la red social X (antes twitter) en la que aparecen las dos mujeres hablando por teléfono con el mandatario, con rostros sonrientes.
También en X publicó una fotografía el propio Biden en la que aparece hablando por teléfono, con una gran sonrisa, desde el Despacho Oval.
“Acabo de hablar con las dos estadounidenses liberadas hoy después de ser rehenes de Hamás. Les hago saber que su gobierno las apoyará plenamente mientras se recuperan y sanan. Jill (la primera dama) y yo seguiremos manteniendo cerca de nuestros corazones a todas las familias de estadounidenses desaparecidos”, declaró el presidente.