Look what you made me do. Mira lo que me has hecho hacer. Es el título de una canción muy popular de Taylor Swift, y también lo que tuiteó el todopoderoso productor Jason Blum al poco de que se anunciara que El exorcista: Creyente cambiaba la fecha de estreno. La huelga doble de Hollywood ha conducido a que el mes de octubre se plantee bastante escaso de grandes lanzamientos que convoquen a la audiencia, y en este sentido la quinta entrega (sexta si asumimos como otra más el montaje del director de Paul Schrader de El exorcista: El comienzo) de una saga tan famosa podía marcar la diferencia.
Pero hasta cierto punto. Blumhouse, productora de terror que lidera Blum, había programado El exorcista: Creyente para el viernes 13 de octubre: una buena fecha que ampliaba el atractivo de la propuesta, dirigida por David Gordon Green tras la última trilogía de Halloween y contando con el regreso de Ellen Burstyn. Sin embargo, a Taylor Swift le dio por programar para el mismo día el estreno de The Eras Tour: una película documental sobre la actual gira que está arrasando a lo largo del mundo. Según se empezó a ver que las entradas para ir a ver el documental a los cines de EE.UU. se agotaban, Blum hubo de recular.
Así que anunció que Creyente adelantaba su fecha a una semana previa, para el viernes 6 de octubre. Entonces no ocultó el motivo por el que lo hacía (para muestra, el citado tuit) pero no llegó a hacer declaraciones oficiales al respecto. Ahora, entrevistado por Entertainment Weekly, el productor ha abordado el tema con buen humor, sin hostilidad por la decisión de Taylor. “Teníamos este increíble viernes 13, el mejor día para estrenar una película de terror. Pero obviamente movimos la fecha y nos doblegamos ante Taylor Swift”, confirma el líder de Blumhouse.
Fuente: Cinemanía
