Jesús Utrilla / NV Noticias
En el camino hacia la igualdad de género, es esencial promover la presencia activa y bien remunerada de mujeres en puestos gerenciales.
En el ámbito público, esto adquiere aún mayor relevancia ante la posibilidad de que México tenga a su primera presidenta de la República.
Norma Alicia Ramírez Hinojosa, presidenta del Consejo Coordinador de Mujeres Empresarias, destaca que la participación de mujeres en la formulación de políticas y la toma de decisiones a nivel estatal, local y federal contribuye a un gobierno más representativo y sensible a las necesidades de toda la sociedad.
“La constitución habla de paridad en todo, esto quiere decir que no solamente es para posiciones de elección popular como el Congreso o el Ejecutivo sino también en la administración pública. Llegar a la Dirección General de Aduanas y muchos otros porque las mujeres tenemos la misma capacidad que los hombres para desempeñarnos”.
El acceso de las mujeres a puestos gerenciales no solo es una cuestión de justicia social, sino también de rendimiento empresarial.
Estudios demuestran que las empresas con una representación significativa de mujeres en posiciones de liderazgo tienden a ser más innovadoras y rentables.
Garantizar que las mujeres reciban salarios competitivos por su trabajo no solo es un acto de justicia, sino también una inversión en el crecimiento y la estabilidad económica de las comunidades.
“Parte de lo que hacemos es capacitarnos para ser líderes pero también promover entre las empresas que haya un mayor equilibrio entre la contratación de hombres y mujeres. Muchas veces cuando se pasa a una gerencia o dirección son pocas candidatas, el argumento es que son pocas mujeres pero es una falacia. Además el salario deber ser igual porque luego ganan menos, la diferencia es de 20 por ciento entre el salario de mujeres y hombres”.
La diversidad de perspectivas y habilidades que aportan las mujeres es fundamental para la toma de decisiones equilibradas y el éxito sostenido de las organizaciones.
