Quince años después de que el primer libro de la saga Los Juegos del Hambreirrumpiera en la escena, Suzanne Collins ha mantenido su estatus icónico dentro de las narrativas distópicas contemporáneas. Su legado va más allá de las páginas, conquistando la gran pantalla y el imaginario colectivo. Pero en este universo de Panem, donde la heroína Katniss Everdeen (Jennifer Lawrence) se convirtió en un símbolo de resistencia, ¿hay espacio para una nueva protagonista?
Francis Lawrence, director de las secuelas cinematográficas En llamas y Sinsajo, se enfrenta a este dilema en la próxima precuela, Balada de pájaros cantores y serpientes. La película, que se estrenará el 17 de noviembre, se centra en Lucy Gray Baird, interpretada por Rachel Zegler. A diferencia de su antecesora, Lawrence, explica que la nueva protagonista es una “anti-Katniss”. En una entrevista con la revista Empire, explicó: “Katniss era una introvertida y una superviviente. Gray es todo lo contrario. Ella lleva su sexualidad a la vista y realmente es una artista”.
La trama sigue a Coriolanus Snow (Tom Blyth) en sus años de juventud, mucho antes de convertirse en el tirano que gobernará Panem. Snow es asignado como mentor de Gray, una joven del empobrecido Distrito 12. Contrastando con Katniss, quien se convirtió en una cara renuente de la rebelión, la nueva tributo disfruta ser el centro de atención. “A ella le encantan las multitudes”, dice Lawrence. “Ella sabe cómo jugar con ellos y manipularlos”.
El largometraje también promete mostrar una visión más profunda de un Capitolio en ruinas, donde la familia de Snow lucha por mantener su estatus en una sociedad posguerra. Con los décimos Juegos del Hambre acercándose rápidamente, la dupla verá una oportunidad en cambiar las probabilidades a su favor. La dinámica entre los personajes promete ser un juego de poder y manipulación, donde cada uno tiene algo que ganar y mucho que perder.
Fuente: Infobae