Bajos Instintos es considerado uno de los mejores thrillers de la década de los 90. La película no sólo significó un antes y después para la meca del cine, sino también catapultó la carrera de sus protagonistas, Michael Douglas y Sharon Stone; sin embargo, para la actriz las repercusiones no fueron del todo positivas.
Durante un episodio del podcast Table for Two with Bruce Bozzi, la actriz estadunidense reveló que un juez puso en duda su capacidad para ser mamá debido a su participación en la cinta de 1992, dirigida por Paul Verhoeven.
Sharon Stone contó que la fama que adquirió tras Bajos Instintos le jugó en contra tras su divorcio de Phil Bronstein en 2004, ya que durante el juicio para definir quién se quedaría con la custodia de Roan, el hijo que adoptaron juntos, el juez cuestionó su integridad debido al papel que interpretó en la cinta.
“El juez le preguntó a mi hijo, a mi niño pequeño: ‘¿sabes que tu madre hace películas de adultos?’ Es una especie de abuso del sistema, que se valorara el tipo de madre que era sólo por haber hecho esa película”.
La actriz, cuyo hijo tenía tan sólo 8 años en ese momento, recalcó que se trató de un abuso y añadió que aún no puede creer que la breve secuencia en la que aparentemente está desnuda fuera suficiente para que un juez cuestionara su papel de mamá.
“Hoy en día la gente se pasea desnuda en las series de televisión y no pasa nada, y en mi caso bastó con 16 segundos de un posible desnudo mío para que perdiera la custodia de mi hijo”.
En 2008, la estrella de Hollywood intentó apelar la decisión del tribunal, pero el resultado resultó siendo el mismo. La sentencia significó un duro golpe para la actriz, pues a raíz de ello enfrentó serios problemas de salud y le diagnosticaron un trastorno alimenticio.
“Acabé en la Clínica Mayo con latidos adicionales en las cámaras superiores e inferiores de mi corazón”, comentó, “Cuando utilizamos la frase de me rompe el corazón, esto lo rompió literalmente”.
Fuente: Milenio
