El gobierno de Estados Unidos planea ampliar los requisitos mínimos de seguridad cibernética para sectores críticos y ser más rápido y agresivo en la prevención de ataques cibernéticos antes de que ocurran, incluso mediante el uso de herramientas militares, policiales y diplomáticas, según un documento de estrategia de la administración Biden lanzado este jueves.
La administración demócrata también tiene la intención de trabajar con el Congreso en una legislación que impondría responsabilidad legal a los fabricantes de software cuyos productos no cumplen con lassalvaguardas básicas de seguridad cibernética, dijeron las autoridades.
La estrategia codifica en gran medida el trabajo que ya ha estado en marcha durante los últimos dos años sobre una serie deataques de ransomware de alto perfil en infraestructura crítica.
Un ataque a un importante oleoducto de combustible que provocó el pánico en la bomba y provocó una escasez de combustible en la costa este, así como otros ataques, centraron la atención en la ciberseguridad. Pero los funcionarios esperan que la nueva estrategia siente las bases para contrarrestar un entorno cibernético cada vez más desafiante.
La administración del presidente Joe Biden ya ha tomado medidas para imponer regulaciones de seguridad cibernética en ciertos sectores industriales críticos, como las empresas eléctricas y las instalaciones nucleares, y la estrategia exige que los requisitos mínimos se amplíen a otros sectores vitales.
Anne Neuberger, asesora adjunta de seguridad nacional de la administración para tecnología cibernética y emergente, dijo en una conferencia telefónica con reporteros que era “crítico que el pueblo estadounidense tuviera confianza en la disponibilidad y capacidad de recuperación de nuestra infraestructura crítica y los servicios esenciales que brinda”.
La administración también quiere transferir la responsabilidad legal a los fabricantes de software que no toman las precauciones básicas para producir tecnología segura, diciendo que las empresas deben rendir cuentas en lugar de los usuarios finales.
Fuente: El Universal
