El ex gobernador de Puebla, Mario Marín, se mantendrá en el penal de máxima seguridad de “El Altiplano”, en el Estado de México, luego de que una jueza de distrito ratificó la prisión preventiva en su contra por el caso de tortura a la periodista Lydia Cacho.
La Fiscalía General de la República (FGR) informó que durante la audiencia de revisión de medidas cautelares, en Quintana Roo, el ex gobernador pedía continuar con su proceso el libertad, medida que le fue negada.
Además, el imputado, dijo, solicitaba se le impusieran nuevas medidas consistentes en residir en un lugar determinado y acudir al juzgado correspondiente de manera periódica para garantizar su presentación al proceso penal que se le sigue por su probable responsabilidad en el delito de tortura en perjuicio de una periodista.
Por lo que los Ministerios Públicos de la Federación (MPF), de la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), en su Delegación de Quintana Roo y de la FEADLE, perteneciente a la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos (FEMDH), presentaron las pruebas para que se mantuviera la prisión en su contra.
Argumentó que existe un riesgo fundado de fuga, la falta de arraigo del imputado en el lugar del proceso, que los retrasos en el proceso penal que se le sigue al imputado corresponde a actos procesales de la defensa y la complejidad del proceso penal que se instaura en su contra.
El caso deviene de la acusación realizada por la FEADLE por su presunta responsabilidad en valerse de las instituciones públicas de Puebla que se encontraban bajo su mando y que, como titular del Ejecutivo estatal, ordenó la tortura de una reconocida periodista como castigo a su libertad de expresión.
El ahora acusado fue detenido en febrero de 2021, en Acapulco, Guerrero, y recientemente el 27 de enero fue trasladado de un penal de Quintana Roo al penal de máxima seguridad de El Altiplano en el Estado de México.
Fuente: Milenio