El presidente de España, Pedro Sánchez, aseguró que “es más que probable” que el país termine el año con un crecimiento aún más alto de lo esperado y muy por encima de los grandes países del entorno europeo.
Durante su balance de fin de año en el Palacio de La Moncloa, el líder socialista refirió que el Producto Interior Bruto (PIB) crecerá este año “más de 5 por ciento interanual”, una tasa superior al 4.4 por ciento inicialmente previsto por el Ejecutivo.
“Es muy probable que terminemos el año con un crecimiento aún más alto del esperado, superando en consecuencia más del 5 por ciento de crecimiento interanual del PIB español”, adelantó al dar a conocer el tercer paquete de ayudas para paliar las consecuencias económicas y sociales de la guerra en Ucrania.
Se trata de una cifra que se sitúa, según el jefe del Ejecutivo “muy por encima” de los grandes países del entorno, de la media de eurozona y de las principales economías avanzada, muestra de la “enorme fortaleza y solidez” de la economía española.
Además, anunció que el gobierno suprime durante seis meses el IVA del 4 por ciento que se aplica a todos los alimentos de primera necesidad, entre ellos el pan o la leche, y rebaja del 10 al 5 por ciento el del aceite y la pasta para hacer frente al impacto de la guerra de Ucraniay el alza de la inflación.
Pedro Sánchez añadió que el Ejecutivo también ha aprobado ayudas directas a los agricultores en compensación con el incremento del precio de los fertilizantes.
“El gobierno va a asegurar que las rebajas del IVA se trasladan de forma inmediata en los precios de los alimentos, vamos a establecer la obligatoriedad de que se traslade esta reducción al precio de los alimentos”, indicó.
El IVA de la alimentación en España varía entre el tipo reducido (10 por ciento) y el súper-reducido (4 por ciento). Se consideran productos de alimentación aquellos que pueden servir como alimento para humanos o animales.
Todos esos productos están sujetos al 10 por ciento del IVA (carne, pescado, aceite o pasta), salvo aquellos que se consideran alimentos de primera necesidad como la leche, los huevos, las frutas y verduras, el pan o las legumbres y que se gravan con el tipo súper-reducido del 4 por ciento.
No obstante, hay ciertos alimentos que no se encuadran en ninguna de estas categorías, como las bebidas azucaradas o alcohólicas, a las que se les aplica el tipo general del IVA del 21 por ciento.
Fuente: Milenio
