Por José Luis Enríquez Ambell
“Si está trabajando bien para qué lo quitas y si está trabajando mal para que lo promueves”. Frase atribuida a Don Jesús Reyes Heroles; tuxpeño, político e ideólogo mexicano.
Diversas fuentes políticas, en lo local y nacional, así como en pasillos del poder, la noticia de renuncia de Hugo Gutiérrez a la Secretaria de Seguridad Pública en el Estado circuló velozmente, pero era desde tiempo atrás un tema recurrente en torno a su salida en términos de la inseguridad que percibe la ciudadana y la estadística creciente en ese rubro.
Los ahora designados responsables y encargados del despacho de la SSP recae en personal llevado ahí por quien salió; o sea, el cambio puede ser relativo, pero igualmente se desea que resulte para bien de todos los veracruzanos.
Hablar de salida, renuncia, marcha o empujamiento para que Hugo Gutiérrez abandonara el puesto que asumió desde diciembre de 2018 quizá provoque una muy elevada serie de especulaciones dado que los cambios profundos en materia de seguridad pública ha venido siendo una exigencia social desde hace tiempo.
El tema Seguridad Pública en el País no sólo en Veracruz -sin que signifique una justificación- debemos reconocer que no atraviesa por sus mejores momentos junto a la procuración y administración de justicia que han llevado incluso a que se hayan presentado marchas que se suman al descontento ciudadano que pareciera no se combate exitosamente a la delincuencia en general.
Los cambios que a veces se presentan en el gobierno -en todo sexenio- no es preciso que resulten como en el fútbol americano dónde los cambios se dan en un elevado número, y ahí es donde la especulación olvida la cautela y en redes sociales lo ilimitado encuentra un fértil y creciente deslizamiento que lleva a la desinformación.
Por lo pronto, este tema seguirá en las noticias diarias por un buen tiempo.
UN CAFÉ CON DOBLE CARGA
La región de Xalapa y Coatepec este fin de semana atrajo un turismo de la vida nacional en lo político, económico y social para reunirse en torno al enlace matrimonial,- religioso y civil,- que unirá además de los contrayentes, a dos familias que en su conjunto son de una alta estima. Salud y muchas felicidades.
¡ ES CUANTO !
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