Los últimos dos corgis de la reina Isabel II estuvieron presentes durante su funeral minutos antes de que su féretro entrara a la capilla San Jorge para ser sepultada en los terrenos del castillo de Windsor junto a los restos de otros 10 monarcas y los del príncipe Felipe, su esposo.
Muick y Sandy, los perros pertenecientes a la raza favorita de la monarca estuvieron presentes a la espera del cortejo fúnebre en el castillo de Windsor.
Hay que recordar que los canes fueron adoptados por el príncipe Andrés de Gran Bretaña. Aquí te dejamos la nota completa.
Fuente: Milenio
