La inauguración del Congreso Nacional de Morena fue un cierre de filas no solo lo de los delegados, también de gobernadores y secretarios federales que al grito de “¡presidenta, presidenta!”, se pusieron de pie y le levantaron ambos brazos a la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum.
Flanqueada por el líder nacional de Morena, Mario Delgado, y del gobernador de Chiapas, Rutilio Escandón, la jefa de Gobierno se dejó apapachar por los morenistas.
Sonrió y agradeció las porras que sin duda le ganó al secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, quien también recibió respaldo, pero mucho menos sonoro. Marcelo Ebrard, la otra ‘corcholata’ del presidente Andrés Manuel López Obrador, no acudió al Congreso debido a que viajó la noche del viernes a Londres a representar al Presidente de México en los funerales de la Reina Isabel II.
Los gobernadores de Campeche, Layda Sansores, y los electos de Oaxaca, Salomón Jara, y de Tamaulipas, Américo Villareal, fueron de los más vitoreados, en contraste, durante la presentación de los invitados, los gobernadores de Chiapas, Rutilio Escandón, y David Monreal, de Zacatecas, fueron abucheados por un sector de los congresistas nacionales.
En su discurso, Mario Delgado celebró lo logrado por Morena los últimos cuatro años y dijo que los avances del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha hecho de México, un referente mundial y de manera particular en América Latina.
Pidió a la militancia no confiarse porque el desafío será muy grande y la trascendencia del movimiento que hoy encabeza López Obrador dependerá de los morenistas.
“Para lograr esta trascendencia hay un único camino, seguir la mística de Andrés Manuel López Obrador. Lo único que importa es seguir haciendo historia nacional y no escribir una historia personal”, dijo en su mensaje.
Por ello, pidió a los militantes y particularmente a los aspirantes presidenciales, “unir y no dividir”. Al inicio de los mensajes, Bertha Luján, presidenta del Consejo Nacional, dijo que uno de los puntos más polémicos que fueron discutidos en los estados es la posibilidad de abrir a la ciudadanía la elección del presidente y secretaría general del partido y planteó que se mantenga a un proceso solo entre militantes.
Los trabajos del Congreso y los cambios estatutarios se llevarán a cabo a lo largo de este sábado y por la noche se elegirá al nuevo Comité Ejecutivo Nacional que acompañará a Mario Delgado y Citlalli Hernández, así como al Consejo Nacional y se ha cabildeado la posibilidad de que sea el gobernador de Sonora, Alfonso Durazo.
Fuente: Milenio
