Trece meses después de su brutal accidente automovilístico, Tiger Woods arrancó el jueves un nuevo y asombroso regreso al golf al dar el golpe de salida del Masters de Augusta, el torneo donde protagonizó algunas de sus mayores gestas.
A sus 46 años, pocos esperaban que el californiano fuera capaz de volver a jugar al máximo nivel por la gravedad de las lesiones sufridas en febrero de 2021 cuando colisionó con su camioneta a casi 140 km/h en un suburbio de Los Ángeles.
Rodeado de una multitud de espectadores, Woods comenzó su recorrido formando grupo con el chileno Joaquín Niemann y el sudafricano Louis Oosthuizen.
El inicio de la primera ronda de la edición 86 del Masters, incluida la salida de Woods, estuvo retrasada unos 30 minutos por las lluvias caídas en las últimas horas en el Augusta National Golf Club (estado de Georgia).
Woods no se mostró satisfecho con su primer golpe, que se quedó corto hasta el búnker del costado derecho. Su golpe de aproximación se salió del green pero alcanzó a concluir su primer hoyo en par.
Cuando Woods abrió su ronda, dos jugadores, el veterano irlandés Padraig Harrington y el amateur Austin Greaser, estaban en la cabeza provisional de la tabla con uno bajo par en nueve hoyos.
El astro estadounidense, que pasó meses sin poder caminar por las múltiples fracturas de piernas sufridas, se ha mostrado confiado en poder competir por su sexta chaqueta verde, con la que igualaría el récord de Jack Nicklaus.
Augusta es un escenario icónico de la legendaria carrera de Woods, donde 25 años atrás abrió una nueva era en el golf con el primero de sus 15 títulos de Grand Slam y el primero de un golfista negro en Augusta.
A primera hora de la mañana, las leyendas del golf Jack Nicklaus, Gary Player y Tom Watson dieron el golpe de salida ceremonial de esta edición.
Fuente: Milenio