Edgard González Suárez
La derecha mexicana ávida de un triunfo, de un éxito, de una ventaja frente al Gobierno federal y al presidente de la república, se dedicó toda la semana anterior a intentar vía entrevistas telefónicas, de radio, en redes, intentar de provocar una ruptura, un enfrentamiento entre Ricardo Monreal y López Obrador.
Lo intentó ya López Dóriga, Brozo, Adela Micha, Loret de Mola, Roberto Zamarripa y recientemente Rene Delgado, todos ellos intentando provocar al senador y propiciar su ruptura con MORENA, propiciar una alianza con la oposición, propiciar un choque con AMLO.
En Julio de 2021, en radio fórmula, López Dóriga, se cansó de insistir para que el senador definiera que con MORENA o sin MORENA el sería candidato presidencial, y una y otra vez, el zacatecano lo evadía, y no pudo obtener esa respuesta. Pero el periodista, terco y obcecado como es, en su editorial dejó claro qué, para él, para el ex televiso, Monreal encabezará a la coalición de la oposición en su lucha por la presidencia de la república.
Apenas en noviembre de 2021, justo después de la aparición de Claudia Sheinbaum en la primera plana de El País, Brozo, otro conductor que no ha dudo a encabezar la oposición contra López Obrador, recibe a Monreal y con su tono satírico, lo confronta con el planteamiento presidencial acerca de las encuestas como método privilegiado, valido y legitimo dentro de Morena para la selección de candidatos; aspecto que choca, contra la propuesta monrealista, de organizar unas elecciones primarias internas dentro de MORENA. También lo confrontó ante el hecho, según el payaso tenebroso, de que AMLO ya se decidió por Claudia y ahora al senador ni lo recibe, ni desayuna con él.
El senador ha dejado claro, en esa y otras entrevistas, que no se enfrentará con el presidente, pero tiene criterio, y opinión propia y está dispuesto a debatir sus propuestas en los foros o espacios que se abran para escucharlo.
Finalmente, llegaron las entrevistas, este mes de enero en REFORMA, con Roberto Zamarripa y la entrevista con Rene delgado, ahora conductor del programa Tercer Grado de Televisa, y articulista del periódico Reforma y del Financiero también. En Reforma, Monreal dicto línea, hablo de las virtudes del centro político, se definió como socialdemócrata, y aclaró que seguirá dentro del Partido, que luchará por su democratización, y les plantó cara a los radicales que quieren obtener cargos y posiciones y que, de seguir con sus pretensiones, según Monreal, no dejaran nada en el país, puesto que el radicalismo solo deja destrucción.
Y solo apenas hace cinco días, en el Financiero Bloomberg, Rene Delgado, lo acechó nuevamente para decirle que Claudia Sheinbaum ya había respaldado al Gobernador de Veracruz; que José María del Río Virgen seguía en la cárcel, que muchos, anuncian ya, un cambio en la coordinación de senadores de Morena; y qué, según el periodista, prácticamente, era su fin dentro de ese proyecto político, razón por la cual le preguntaba sin más ¿“Ricardo Monreal que sigue”?
A lo cual, tratando de mantener el temple, respondió: Claudia y Cuitláhuac pertenecen a un mismo equipo político, por lo cual es natural que se cobijen uno a otro; Aclaró que su relación con el poder ejecutivo se realiza de manera formal y fluida a través del Secretario de Gobernación, y siguen en pie las reformas legislativas. El senador sostiene no tener miedo a los cambios, la agenda legislativa, sostiene, no depende de una persona, además de que en el senado hay pluralidad y libertad para opinar y proponer, aseguró firmemente en confiar de que al final el secretario técnico de la JUCOPO saldrá libre por falta de pruebas.
Pues es clara la intensión política de la oposición mediática, provocar la ruptura, enfrentar al senador con el presidente, intentar aislarlo de sus compañeros de partido y en el senado, promoverlo como precandidato de la oposición. Y ha sido clara la habilidad de Ricardo Monreal para sortear esa intensión y salir a flote hasta ahorita.
Sigo pensando que falta mucho aun por ver, y que este año será decisivo.