Por: José Luis Enríquez Ambell
En Veracruz somos el único manicomio con vista al mar y palmeras suelo decir con humor, alegría y reconocimiento tropical a nuestra bendita y generosa entidad. A mucho orgullo soy sureño de corazón y con derecho de sangre al haber nacido en Juan Díaz Covarrubias municipio de Hueyapan de Ocampo e hijo de también dos veracruzanos con epicentro en la cuenca del Papaloapan y los Tuxtlas.
A 500 años de la conquista y llegada de la cultura española parece ser que aún seguimos siendo tierra para ello.
Decía con una muy fina ironía un jefe que tuve en una oportunidad de comida y diálogo con colaboradores; “¿ cómo, en Veracruz todos son pendejos y ahora necesitan de gobernantes de fuera ?”
Viene a colación por la reforma que casi todos nuestros diputados de la LXVI Legislatura del Estado han promovido para que NO NACIDOS en territorio de Veracruz puedan estar en condiciones de cubrir requisitos para ser gobernador aún cuando la Carta Magna y norma máxima de la república ya lo establece.
El artículo 116 señala ; “Sólo podrá ser gobernador constitucional de un Estado un ciudadano mexicano por nacimiento y nativo de él, o con residencia efectiva no menor de 5 años inmediatamente anteriores al día de los comicios, y tener 30 años cumplidos el día de la elección, o menos, si así lo establece la Constitución Política de la Entidad Federativa”. O sea, no hay Ley o traje a la medida para nadie, si ya la normatividad vigente lo posibilita.
Ahora bien, no nos debe de sorprender que el impacto de esta reforma quiera alcanzar a los homólogos del poder ejecutivo, cuando se vislumbra la centralización de los tres poderes de las entidades federativas. Habrá de decirle adiós a la soberanía veracruzana ? Habrá y tendremos a titulares de los poderes y organismos autónomos no nacidos en Veracruz ?
Así pues, para que tanto brinco si el piso está planito. Ya en Querétaro un veracruzano es Gobernador, en la perla de occidente en mero Guadalajara las Chivas ya tienen un delantero peruano o sea, la globalización del mundo ha llegado a la constitución política del estado de Veracruz de Ignacio de la Llave, dicho de otra forma, nos alcanzó la modernidad así que el paso por los Cabildos veracruzanos es de trámite.
Aprendamos a decir desde hoy ; “soy un veracruzano que acepta haber nacido en otro sitio de la república mexicana.”
¡ ES CUANTO !
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