El presidente Donald Trump declaró que los republicanos de la Cámara de Representantes deberían votar a favor de la publicación de los archivos del caso Jeffrey Epstein, un giro inesperado tras haberse opuesto a la propuesta cuando un número creciente de miembros de su propio partido la apoyaban.
“No tenemos nada que ocultar, y es hora de dejar atrás esta farsa demócrata perpetrada por lunáticos de la izquierda radical para desviar la atención del gran éxito del Partido Republicano”, escribió Trump en redes sociales el domingo por la noche tras aterrizar en la Base Conjunta Andrews después de un fin de semana en Florida.
La declaración de Trump se produjo tras una intensa disputa dentro del Partido Republicano sobre los archivos, incluyendo una ruptura cada vez más tensa con la representante de Georgia, Marjorie Taylor Greene, quien durante mucho tiempo había sido una de sus más fervientes defensoras.
El cambio de postura del presidente es un reconocimiento implícito de que los partidarios de la medida tienen los votos suficientes para aprobarla en la Cámara de Representantes, aunque su futuro en el Senado sea incierto.
Se trata de un raro ejemplo de Trump dando marcha atrás debido a la oposición dentro del Partido Republicano. En su regreso a la presidencia y durante su segundo mandato, Trump ha consolidado en gran medida el poder dentro del partido.
“¡Me da igual!”, escribió Trump en su publicación en redes sociales. “Lo único que me importa es que los republicanos. Vuelvan a centrase en lo esencial”. Los legisladores que apoyan el proyecto de ley han estado prediciendo una gran victoria en la Cámara de Representantes esta semana, con una “avalancha” de republicanos votando a favor, desafiando así a la cúpula del Partido Republicano y al presidente.
Fuente: La Jornada
