El Gobierno de Gaza aseguró este domingo que Israel bloquea la entrada a la Franja de 22 mil camiones de ayuda humanitaria acumulados en los pasos fronterizos del enclave palestino, mientras sus ciudadanos padecen una situación de grave riesgo de hambruna.
En un comunicado, el gobierno gazatí, en manos de Hamás, indica que la mayoría de estos camiones pertenecen a organizaciones internacionales, multilaterales y diversas entidades, y que Israel “impide deliberadamente su entrada como parte de una política sistemática de ingeniería del hambre, el bloqueo y el caos”.
“Condenamos en los términos más enérgicos la continuación del bloqueo, el hambre a los civiles y la retención de la ayuda, considerándolo un crimen de guerra completo que viola todas las normas y tratados internacionales”, dice el Gobierno de Gaza.
Y denuncia a los países “que guardan silencio o complicidad por el agravamiento de la catástrofe humanitaria y las consecuencias catastróficas derivadas de privar a la población de alimentos, medicinas y combustible”.
Por ello, exige la entrada inmediata de todos los camiones retenidos y la apertura de los pasos sin condiciones “para salvar las vidas de los civiles en la Franja de Gaza antes de que sea demasiado tarde”.
Desde que comenzó la ofensiva israelí contra Gaza, tras los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, 175 personas han muerto por hambre o desnutrición, incluidos 93 menores, según el registro de las autoridades sanitarias locales.
La mayoría de las muertes se han registrado durante las últimas semanas, después de meses de bloqueo a la entrada de ayuda humanitaria por parte de Israel, que controla todos los accesos al asediado territorio.
Entre el 2 de marzo y el 19 de mayo el bloqueo fue total, mientras que el flujo de ayuda es ahora muy limitado e insuficiente.
Las agencias de la ONU advirtieron esta semana de que Gaza enfrenta un grave riesgo de hambruna: más de uno de cada tres habitantes pasa días sin comer, y el resto de indicadores de nutrición han alcanzado sus peores niveles desde que comenzó el conflicto.
Ante esta situación y la creciente presión internacional, las autoridades israelíes anunciaron “pausas humanitarias” de los combates en algunas rutas para permitir a los pocos camiones con ayuda que entran al enclave distribuir la carga, aunque la mayor parte acaban siendo saqueados por la población desesperada.
Fuente: Milenio
